Creo firmemente que los seres humanos estamos diseñados para estar acompañados, para formar un equipo, para que uniendo fuerzas, salgamos adelante de cualquier problema que nos aqueje, y que además de todo, estamos diseñados para preservar nuestra propia especie.
Este issue, en especifico, viene siempre acompañado de muchos bemoles, ya que algunos fríamente tiran a la eugenesia, otros sentimentalmente, tiran al cobijo y el buen amor no importando lo que signifique esto, es el solo hecho de conseguir esa formula magistral de la felicidad. Por otro lado están los que buscan el justo medio en el que todo es un equilibrio, ficticio o no, teniendo o no teniendo en cuenta la belleza del o de la "susodicha" pero al final del día todos buscamos estar en pareja, por muy tardado o prematuro que esto sea.
Luego aparece la presión social y la biológica, que nos juegan unos desaguisados del tamaño del estadio Azteca, ya que si caemos en este tipo de presión, nos encontrarmos en una estación donde tomaremos el primer tren que llegue considerando que es la ultima corrida de la vida, y al final vienen los fracasos y los divorcios y sinsabores.
Pero no nos damos cuenta de que este tipo de delicadas decisiones, son de vital importancia para nuestro futuro, y al final del día, todos (o por lo menos la mayoría, quiero suponer) no tenemos insertado el chip del divorcio express, sino que por el contrario buscamos el bienestar de nuestra nueva familia y conservamos el precepto religioso o el legal de "hasta que la muerte nos separe".
Qué es lo que hace que todo funcione?
A mi parecer y desde mi punto de vista pues son sencillos pero complicados a seguir, los puntos que nos mantienen en este mundo de las relaciones interpersonales son: la comunicación, el compañerismo y la complicidad, el respeto, el formar un buen equipo de trabajo y el amor confiado.
La sentencia es la sigiente:
¿Qué tanto estamos dispuestos a ceder y a volver a empezar?...
Y mientras tanto, sigo mi camino a la cama pensando en un pronto acompañado de un confort disfrazado de sonrisa.
Completamente de acuerdo, nose cuantas veces me he equivocado en la busqueda, pero no por eso dejare de luchar para poder encontrar al compañero de mis sueños, besos y gracias por compartir tus pensamientos.
ReplyDelete¡Ojala existiera la respuesta en una receta para seguirla y listo!, aunque considero que eso le restaría magia a la aventura de construir una relación de pareja. Definitivamente comulgo con los puntos que señalas -“La comunicación, el compañerismo, la complicidad, el respeto, formar un buen equipo de trabajo y el amor confiado”- sin restar importancia a lo anterior, creo firmemente que el cuestionamiento no es ¿qué tanto estamos dispuestos a ceder y a volver a empezar? Me parece que ceder se traslada al sentimiento de sacrificio, dudo mucho que estar en pareja signifique sacrificio, si así lo fuera entonces no se esta listo para dejar la soltería o esa persona no es necesariamente con la que queremos construir una vida en común.
ReplyDelete¿Realmente te pareció un sacrificio ceder y no volver a empezar?
y a proposito de querer un amor, creo que este poema queda muy bien:
=Quiero Un Amor de Julia Prilutzky=
Quiero un amor de todos los instantes,
aunque no sea un amor para la vida;
quiero un amor con la ansiedad del antes
para después del ansia desmedida.
Quiero la fe de todos los amantes
en este solo amor, ver contenida:
tumulto de horizontes trashumantes
y luego, claridad de agua dormida.
Quiero un amor transfigurado en fuente
de todo florecer: fruto y simiente;
a tal único amor, mi amor sentencio:
aquél de la impaciencia y el latido
y la fiebre y el grito y el gemido
y el difícil momento del silencio.